Siempre me deja atónito la retardación de este argumento, pero les encanta seguir repitiéndolo como si fuera un argumento contundente sin importar cuántas veces se lo expliques. Todo, incluida la ironía y la provocación, debe tener límites para que ciertas cosas signifiquen algo, algunas cosas signifiquen más que otras, para que haya una jerarquía de significado que evite que las cosas desciendan al nihilismo. La ironía y la provocación son, obviamente, herramientas que diferentes personas utilizan para diferentes fines, algunos buenos, otros malignos. No creo que sea "justo" preguntar por qué hacer bromas sarcásticas o ser casualmente racista o tener opiniones conservadoras no es lo mismo que regocijarse en la miseria y muerte de tus oponentes políticos, ya que esto ya es evidente para la mayoría de las personas normales. De hecho, es un poco manipulador y está diseñado para deshumanizarte.