El patrón que estamos viendo últimamente no se trata solo de una mala ejecución, se trata de prioridades. Demasiados proyectos se centran en los ciclos de exageración y la acción del precio a corto plazo, en lugar de la confianza de la comunidad y el posicionamiento a largo plazo. Un airdrop no es solo una herramienta de marketing; es una declaración de cómo un proyecto valora a sus primeros creyentes. Cuando los equipos no logran entregar asignaciones justas o estructurar mal sus lanzamientos, le dice todo sobre cómo manejarán la gobernanza, las asociaciones y los incentivos para los usuarios más adelante. Es por eso que las personas aún prestan atención a los proyectos que se comunican claramente y recompensan genuinamente. Se destacan sin necesidad de sobrevender. Si la próxima ola de lanzamientos como Billions y Solstice puede hacer esto bien, finalmente podríamos alejarnos de la cultura de "cultivar y tirar" que ha estado frenando el crecimiento de Web3.