Hace unos meses, Israel estaba listo para conformarse con un acuerdo parcial conocido como el acuerdo Witkoff. Los términos eran la mitad de los rehenes y un alto el fuego de sesenta días. Macron y Starmer anunciaron entonces que reconocerían un Estado palestino. Esa medida convenció a Hamas de que sería una tontería aceptar el acuerdo, ya que se les estaba entregando el reconocimiento sin liberar a un solo rehén. Israel cambió de rumbo. En lugar de ofrecer compromisos, presionó con fuerza en Gaza con el objetivo de forzar un acuerdo de rehenes a través de la presión militar. Cuando la presión falló, Israel hizo que su posición fuera inequívoca. No más acuerdos parciales. O se libera a todos los rehenes o se tomará la ciudad de Gaza, el último bastión de Hamas. Solo después de que Israel ya había avanzado significativamente, Hamas anunció que estaba dispuesto a aceptar un acuerdo parcial. En ese momento ya era demasiado tarde. Ahora Macron y Starmer insisten en que Israel debería detenerse y aceptar un alto el fuego. La respuesta sigue siendo firme. En absoluto. Israel ahora conquistará la ciudad de Gaza a menos que los terroristas liberen a TODOS los rehenes.
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