Siento que esta semana es el momento adecuado para sacar esto a la luz. Si tu trading se siente emocionante todos los días, eso debería ser una advertencia. La emoción en los mercados es casi siempre el subproducto del desorden: sobredimensionamiento, sobreoperación, juego, o una mezcla de los tres. La ironía es que el buen trading rara vez se siente emocionante. Cuanto más refinado sea tu proceso, menos drama crea. Las apuestas sólidas no exigen una reacción constante.....el trabajo ya está hecho: tesis definida, riesgo establecido, condiciones de salida claras. Ese tipo de claridad no crea adrenalina. Ten cuidado. El mercado siempre tendrá emociones para vender a cualquiera que esté dispuesto a pagarlas. La factura llega en forma de deslizamientos, rotación y malas apuestas. El aburrimiento, más a menudo que no, es evidencia de convicción. Cuando realmente conoces tus posiciones, no hay mucho que hacer más que esperar. La quietud es la habilidad. Mantenlo tranquilo, mantenlo escalable, mantenlo pagado.