Cuando algunos todavía insisten en usar "moneda virtual" para negar el Crypto, la historia ya ha escrito la respuesta. Las finanzas nunca han sido un árbitro sesgado; todas las monedas, al final, deben regresar al mundo real— Cuando las criptomonedas hacen que los pagos transfronterizos ya no sean costosos intermediarios, ni sistemas de liquidación prolongados, sino que se completan instantáneamente en la cadena; Cuando los freelancers en diferentes países pueden recibir su pago en minutos, en lugar de esperar largas transferencias bancarias; Cuando las familias en regiones inestables pueden proteger su valor a través de activos en la cadena, sin preocuparse por el cierre de bancos o la devaluación de la moneda… Lo virtual y lo real, en realidad, no tienen superioridad. Lo que decide el valor no es la etiqueta, sino si el sistema es abierto, transparente e igualitario. Solo un sistema así puede evitar que el capital esté en vano y realmente inyectar eficiencia en lo tangible. El futuro, en realidad, ya ha llegado 😉