La humanidad es rica. Todos nosotros, cada uno de nosotros, somos herederos de una gran fortuna de conocimiento, tecnología y capital de infraestructura. Somos tan ricos, que incluso unas pocas horas de trabajo humano tienen la capacidad productiva de sostener esa misma vida humana cómodamente durante semanas, o incluso meses. ¿Entiendes? Desde un punto de vista estrictamente económico, solo unas pocas horas de trabajo ordinario por semana deberían ser suficientes para mantener un estilo de vida de clase media alta. Entonces, ¿por qué no es así? ¿Por qué los humanos están trabajando más horas hoy que nunca, a pesar de que nuestra capacidad productiva es un orden de magnitud mayor que lo que era hace 100 años? La respuesta. Robo. La riqueza se está drenando de manera continua a través de impuestos directos (ingresos, ventas, propiedad, etc.) e impuestos indirectos (inflación), siendo este último el más insidioso y egregio, ambos posibles gracias a un único mecanismo: el dinero fiduciario basado en deuda. Corrige esto, y en solo unas pocas décadas, la persona promedio (globalmente) solo necesitará trabajar de 2 a 4 horas por semana para vivir como los estadounidenses de clase media alta hoy.