En un vuelo de 5 horas. El chico a mi lado se queja del alto costo de vida, de lo imposible que es salir adelante y de la suerte de los ricos. Mientras tanto, pidió 6+ bebidas alcohólicas y vio el juego de béisbol antes de despotricar y difamar la política a alguien más igual de borracho. Momentos como este dejan bastante claro que no se trata solo de suerte... se trata de cómo pasas tu tiempo cuando nadie está mirando.