El presidente Trump y los republicanos del Congreso ya están perjudicando a los nevadenses que están lidiando con altos costos, una desaceleración económica y una crisis de atención médica inminente. A esta administración no le importan los nevadenses, pero a mí sí. Es por eso que no puedo apoyar un cierre costoso que dañaría a las familias de Nevada y daría aún más poder a esta administración imprudente. Necesitamos una solución bipartidista para abordar esta inminente crisis de atención médica, pero no deberíamos cambiar el dolor de un grupo de estadounidenses por otro. Sigo enfocado en proteger la atención médica para las familias trabajadoras, y hago un llamado a mis colegas de ambos lados del pasillo para que trabajen juntos para abordar este problema.