Barack Obama se pronuncia en contra de que el programa de Jimmy Kimmel sea retirado del aire: "Después de años de quejarse de la cultura de la cancelación, la administración actual la ha llevado a un nivel nuevo y peligroso al amenazar rutinariamente con acciones regulatorias contra las empresas de medios a menos que amordacen o despidan a los reporteros y comentaristas que no le gustan".