Habilidad para la vida subestimada: Saber cuándo parar. Deja de discutir con personas que no escuchan. Deja de perseguir a las personas que huyen. Deja de forzar relaciones que te agotan. Deja de moler cosas que no importan. Deja de decir que sí cuando quieres decir que no. Detenerse no es debilidad, es sabiduría.