Una de las peculiaridades extraordinarias de la historia será el declive de la clase experta solo uno o dos años antes del nacimiento de la inteligencia artificial moderna. Es probable que los historiadores combinen estos dos momentos: el colapso institucional de la era Covid parece haber dejado el enorme vacío para la IA de consumo ampliamente utilizada, pero estos son movimientos claramente distintos. Muchos de los actores más importantes de la IA fueron (y son) institucionalistas declarados y seguidores de las reglas, y cumplieron felizmente con la clase de expertos y gerentes durante Covid y la histeria de principios de la década de 2020. Pero es descabellado pensar que parecerá que reemplazamos a los expertos acreditados con máquinas inteligentes al mismo tiempo, y que todo esto fue por diseño.