El LB de los Packers, Micah Parsons, ha estado lidiando con un esguince de la articulación facetaria L4/L5 en su espalda y puede que reciba una inyección epidural antes del partido del domingo contra los Lions si es necesario para ayudarlo a jugar, según fuentes. Antes de intercambiar a Parsons la semana pasada, los Cowboys le prescribieron un plan de cinco días de un corticosteroide antiinflamatorio, un prednisone para ayudarlo a recuperarse de la rigidez en la espalda. También lo tenían en un programa de fisioterapia.   Parsons ha estado practicando esta semana y está intentando jugar en el partido inaugural del domingo contra los Lions, aunque una fuente dijo que aún es incierto si lo hará.